Por: Daniela Muñiz
¿Sabías que los tatuajes son considerados en muchas culturas como símbolos de valentía o belleza?
Aunque en la nuestra es más una moda que una tradición cultural, lo cierto es que se ven superpadres y representan los gustos o la forma de ser de las personas.
Si estás pensando en hacerte un tattoo, ánimate; vida sólo hay una, y hay que disfrutarla, pero antes, es importante que tomes en cuenta algunas cosillas para que no te agarren en curva.
Platicamos con Sergio Castro, un tatuador profesional que, aunque lleva sólo 3 años inmerso en el mundo del arte en la piel, posee mucha experiencia y amplios conocimientos sobre los tattoos que compartió con nosotros. Además nos invitó a un lugar. Toma nota.
Existen varias técnicas
Por ejemplo los tatuajes tradicionales hechos a mano con la técnica ancestral de los olmecas, el realismo, o la técnica japonesa, que utiliza una cañita de bambú y unas agujas amarradas para inyectar la tinta. ¡Woow!
¿Qué onda con la tinta?
Hay tintas vegetales y sintéticas. La ventaja de las primeras están hechas de manera natural a base pigmentos orgánicos, pero lo malo es que sus colores no son tan vivos y suelen decolorarse más rápido.
Por el contrario las sintéticas ofrecen tonos más brillantes, pero por los químicos pueden traer un poco de alergia.
¡No te preocupes! Todas las tintas que él utiliza están homologadas y aprobadas por la Secretaría de Salud, así que no tendrás ningún problema.
¿Dónde duele más?
Las partes del cuerpo más sensibles son aquellas donde la piel es escasa o está más pegada al hueso, como la zona de las costillas, rodillas, codos, empeine o tobillos.
Lógicamente dónde se siente menos es en las zonas donde haya más piel acumulada como brazos y piernas.
No duele, arde
De acuerdo con Sergio, la sensación no es de dolor, sino de ardor “como si te hubieras raspado o quemado”.
¿Cómo sé que no me voy a contagiar de algo?
Cuando acudes a un lugar, debes fijarte que esté limpio. Observa las paredes, generalmente tienen sus reportes de salubridad como evidencia de su confiabilidad. Si no es así, pregunta por ellos.
El tatuador debe enseñarte las agujas selladas, esterilizadas, mostrarte la fecha de caducidad y abrirlas frente a ti. Cuando termine de tatuarte, asegúrate de que las tire a la basura. Además tiene que usar guantes y cubrebocas.
Cuidados posteriores
Después de hacerte un tatuaje, la piel queda sensible, es como si trajeras una herida y hay que cuidarla para que no se infecte.
¿Cómo?
Aplicar una crema neutra en la zona del tatuaje, cero albercas, mar o ríos, y no te expongas al sol.
El tiempo aproximado de sanación es de dos meses, aunque dependerá del tamaño del tattoo.
Se debe retocar
Sí, pero para que eso pase pueden pasar incluso hasta 5 años (si es que te hicieron bien el tatuaje), así que no te preocupes.
“Lo malo es que no podré donar sangre”
¡Error! Por su puesto que puedes donar sangre y ser un salvador de vidas. Si estás seguro que te lo hiciste en un lugar confiable, no tienes nada de qué preocuparte. La única condición que te ponen en algunos hospitales es que te hayas hecho el tatuaje mínimo 6 meses antes de la donación.
Si quieres conocer más sobre la cultura del arte en la piel, nuestro talentosísimo artista Sergio Castro, te invita a que asistas a la Convención Internacional del Tatuaje en Tabasco, un evento familiar donde se abordarán más específicamente estos temas, habrá seminarios, pláticas, muestras, actividades para toda la familia y, si te animas hacerte un dibujo ahí, será 100% seguro y confiable.
Si no vives en Tabasco, también habrá una convención en la CDMX.
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