Redacción: Central
Lucas Warren es apenas un bebé de un año de edad con Síndrome de Down, y entre 140 mil participantes que subieron sus fotografías a la página de Gerber, fue elegido para ser la nueva cara de la famosa marca.
La selección del pequeño, determina una nueva etapa para la empresa y es que las marcas deben abrirse al mundo diverso en el que se encuentran inmersas, buscando la representación de la belleza y las diferencias.
El concurso se lleva a cabo desde hace 90 años y es famoso entre los estadounidenses. En esta ocasión la familia del Lucas recibirá un cheque por 50 mil dólares como parte del premio, y su fotografía será impresa en los productos durante todo un año.
La madre del niño confesó haberlo inscrito sin muchas esperanzas de ganar, pero su objetivo es impactar a muchos y ayudar a que miles de niños se sientan aceptados, reconocidos y no limitados por sus diferencias.