Existen hábitos que hacemos todos los días que pueden matarnos lentamente.
Una investigación publicada en la revista American Heart Association Circulation, encontró vínculos preocupantes entre las altas ingestas de bebidas azucaradas, refrescos y la muerte prematura.
1. Ingerir bebidas azucaradas y alimentos procesados
Tomar refrescos, jugos industriales y otras bebidas excesivamente endulzadas tiene un alto precio para nuestros cuerpos. Un estudio de 34 años con más de 118.000 personas sugirió que cuanto más bebidas azucaradas se toman, aumentan las posibilidades de morir por problemas cardíacos y otras enfermedades.
Además de evitar el consumo frecuente, un grupo de investigación sugiere que es fundamental adoptar una dieta rica en verduras acompañada por proteínas y grasas saludables. Esto ayuda a regular el peso, mantener la mente ágil y proteger el corazón y el cerebro. Por tanto, aboga por una ingesta alta de vegetales, nueces, granos enteros, grasas saludables como el aguacate, pescados azules o aceite de oliva, reduce el consumo de bebidas azucaradas, alimentos procesados, carnes rojas, grasas trans y sal.
2. Fumar
Ningún otro hábito está tan ligado a la muerte como el tabaquismo. Además del cáncer, fumar causa enfermedades cardíacas. También puede provocar accidentes cerebrovasculares, enfermedades pulmonares, diabetes y enfermedad pulmonar obstructiva crónica, que incluye enfisema y bronquitis crónica, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
Los fumadores inhalan tabaco quemado y alquitrán junto con metales tóxicos, como el cadmio y el berilio, y elementos como el níquel y el cromo, que se acumulan naturalmente en las hojas de la planta del tabaco. Los estudios vinculan no fumar con una vida más larga y dejar de fumar alarga la esperanza de vida.
3. Estar sentado mucho tiempo
El sedentarismo durante largos períodos de tiempo es terrible para tu salud. Es fundamental realizar ejercicio cardiovascular regular. Esto mejora tu estado de ánimo, tu memoria y protege tu cerebro contra el deterioro cognitivo relacionado con la edad.
2. Peso excesivo o escaso
Las personas que pesan por encima o por debajo del promedio parecen enfrentar un riesgo ligeramente mayor de muerte por una variedad de causas, según un estudio evaluó el peso de las personas utilizando una medida llamada índice de masa corporal. En términos generales, un IMC de entre 18.5 y 24.9 se considera dentro del “rango saludable” para adultos mayores de 20 años.
Las personas que tenían IMC que estaban por encima o por debajo del “rango saludable” vivían vidas más cortas que las personas con IMC que se encontraban dentro de ese rango. Cabe mencionar que se deben considerar muchos otros factores determinantes.
5. Beber alcohol en exceso
Consumir ocho bebidas o más por semana para las mujeres y 15 bebidas o más por semana para los hombres se considera consumo excesivo de alcohol. Esto está relacionado con una serie de resultados negativos, incluida una esperanza de vida más corta en general. Otros problemas relacionados con el consumo excesivo de alcohol incluyen cáncer, enfermedades cardíacas, enfermedades respiratorias y lesiones. Lo mejor, desde luego, y tal y como apunta la ciencia es no beber nada.