La modelo rusa Irina Shayk le ha robado el aliento a más de uno publicando una sensual fotografía en blanco y negro en su cuenta de Instagram en la que vuelve a aparecer totalmente desnuda.
En la imagen se le ve posar recostada con los ojos cerrados sobre uno de los brazos de un sillón y cubre sutilmente su cuerpo con una tela de color negro.