Foodie Revista Central

COMPROBADO: Mujeres, este es el baile más sexy

Por: Revista Central 06 mayo 2019 • 1 minutos de lectura

No lo decimos nosotros: lo dice la ciencia.

Compartir:

BAILE SEXY
Foto Archivo

Por Revista Central

Se acabó la duda, se acabó la discusión. La razón por la cual una persona nos parece más sexy al bailar tiene sustento científico. Spoiler alert: tú, fan del paso del robot, lo estás haciendo todo mal. Te contamos:

El estudio fue publicado en Scientific Reports, y consistió en lo siguiente: un grupo de psicólogos del Reino Unido hicieron un estudio con 39 estudiantes (mujeres). Les pidieron que bailaran al ritmo de una canción de Robbie Williams; mientras lo hacían, un equipo de animación grabó cada uno de sus movimientos y los convirtió en un avatar digital con proporciones físicas neutrales, de forma que las personas reclutadas para analizarlo –hombres y mujeres– juzgaran sólo al movimiento.

Contexto: El mismo grupo de científicos estableció en otro estudio cuál era el baile que volvía más sexys a los hombres (próximamente) y, mientras la conclusión de ese experimento centraba la sensualidad en la parte superior del cuerpo, este otro concluye que la sensualidad de una mujer al bailar se abstrae de los movimientos de su cadera y los brazos.

Según este estudio, estos son los movimientos considerados sexys en una mujer al bailar:

Los movimientos amplios de cadera, ritmos asimétricos en las piernas y brazos son la mejor fórmula.

A algunas personas podría parecerle ridículo –y hasta insultante– que la comunidad científica dedique horas de trabajo a temas que son aparentemente tan superficiales. Sin embargo, desde siempre, el baile ha sido parte de cientos de rituales humanos relacionados con la sexualidad y el cortejo. Entonces, si es parte de nuestras conductas más básicas, ¿por qué no saber cómo se hace de forma óptima?

Para reafirmar su punto, el estudio también cuenta con un ejemplo de un baile ‘poco o nada sensual’:

Ahora… otra cosa es cierta: no siempre bailamos para atraer a otra persona, así que, si bien este estudio le pone un toque de ciencia a algunas sospechas que ya teníamos, la verdad es que cada persona puede seguir sintiéndose libre de bailar como el ritmo, la emoción y las ganas de divertirse dicten.

×
X