La celebración de Día de Muertos tiene como característico el poner una ofrenda a nuestros queridos difuntos, y uno de los detalles más importantes de este altar es, sin duda, el poner los platillos favoritos de nuestros seres amados, además de fruta, calaveritas de azúcar o pan de muerto, pero al terminar esta fecha y levantar este tributo, ¿se come la comida de la ofrenda de Día de Muertos?
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De acuerdo a la creencia de muchas personas, los platillos servidos a los difuntos perderán el sabor después del 2 de noviembre, pues los espíritus absorben la esencia y sazón de estos alimentos, por otro lado, algunas supersticiones dicen que esto el ingerir estos es una falta de respeto a las almas a las que se creó este altar, por lo que no debe ser consumida.
A pesar de estas ideas, la comida de la ofrenda de Día de Muertos es perfectamente comestible, e incluso, recomendable, pues así no se genera desperdicio, pues si esta no se consume, se deberá tirar a la basura.
Eso sí, revisa muy bien el alimento que vayas a ingerir, especialmente que no esté echada a perder, y que no tenga gusanos o parásitos de algún tipo, además, si es fruta, procura lavarla, pues al estar al aire libre, puede contener partículas de polvo y otras cosas dañinas para nuestra salud.
En el caso de los dulces, estos son perfectamente comestibles en general, pero en el caso de las calaveritas de azúcar, será mejor que verifiques que no tengan insectos, como hormigas, y en el caso del pan de muerto, si este ya está duro, puedes meterlo unos segundos al horno de microondas con un medio vaso de agua para que este se vuelva a hidratar y se suavice nuevamente.
Existe una excepción, y es respecto a los alimentos que requieran refrigeración, como el pollo con mole, las enchiladas u otros platillos, será mejor que no los comas, pues estos seguramente podrían ser peligrosos al ser consumidos. No olvides que bebidas a base de lácteos, como el atole, o cualquier recipiente con líquido que no tenga tapa, evítalo a toda costa, por otro lado, cualquier bebida cerrada puede ser tomada sin problemas.
/ David Pacheco Ovalle/Getty Images/iStockphoto
Como punto importante, en textos especializados en profundizar sobre la cultura del Día de Muertos, se menciona que de hecho hay un momento adecuado y específico para ingerir los alimentos de la ofrenda, y es al tercer día en el que los espíritus de los difuntos abandonan el plano terrestre, pasando el 2 de noviembre.
Para otras personas, es crucial comerse la comida de la ofrenda de Día de Muertos, pues estos creen que parte de la esencia de sus seres queridos se queda con ellos al consumirla, y de hecho, en algunos hogares se hace una reunión o fiesta para ingerirlos.
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