Durante todo el año, hemos esperado este momento: ¡la temporada de chiles en nogada! Ahora que llegó y estamos listos para prepararlos o ir a nuestro restaurante favorito a pedirlo, surge un pequeño detalle: la bebida que lo acompañará.
Sin duda, en las apuestas para decidir el maridaje perfecto, ganan los rosados, así que te comparto unas opciones que te encantarán. Descubre por qué estos vinos son perfectos para el platillo típico de septiembre y anótalos en tu lista de compras.
Pitaya Grenache (Valle de Guadalupe)
Fue creado por Casta de Vinos para apoyar en la lucha contra el cáncer de mama. Claudia Horta, su propietaria y embajadora de la marca, no solo ha creado un vino solidario, sino uno de los mejores rosados de la zona, con aromas de frutos rojos, gran acidez y una ligereza que no te dejará abandonarlo durante toda la comida.
Rolu Rosado Syrah (105.5 del Valle de San Vicente, B. C.)
Es un vino de alta intensidad en sus aromas, donde la rosa y la jamaica son dominantes con un toque dulce tropical y de ciruela. Estos mismos aromas se reproducen en boca. Luis Rodríguez, quien fuera enólogo de Vinos Wagner en el Valle de Napa, ha creado esta joya enológica en México capaz de combinar con sabores amargos, dulces y picantes.
Casa Madero V Rosado Shiraz (Valle de Parras)
Es delicado a la vista y potente en aromas. Guayaba rosa, nectarina, toronja, durazno, fresa ácida… una gama aromática frutal que se repite en boca, añadiendo notas herbales. La personalidad de este vino rosado encaja alegremente con los sabores intensos de los ceviches, los platos asiáticos y, sobre todo, con platillos de carácter mexicano.
Montefiori Sangiovese
Responde a la fusión de la tradición italiana y el acceso a la alta tecnología, aplicados en Valle de Guadalupe. Es uno de los favoritos de México debido a su gran acidez, su tono rosa pálido y su frescor y elegancia en boca, donde la frambuesa y los arándanos arropan el final.
Una opción inesperada
Si también eres un amante del agave, Mezcal Convite acaba de lanzar UNA’, que significa mujer en zapoteco, abocado con grana cochinilla y hecho para reconocer la lucha que viven las mujeres que padecen cáncer de mama. Al comprar esta botella, un 10% será donado para apoyar esta causa, con el fin de sensibilizar a la población sobre lo que significa prevenir y diagnosticar a tiempo.
Es importante destacar que esta marca no solo se compromete a proteger las tradiciones en la elaboración de esta bebida artesanal, sino que es un referente en su comunidad, apoyando la sustentabilidad y el comercio justo.
Lee más de la Bitácora Gastronómica de María Forcada aquí.
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