En la serie documental The Me You Can’t See el príncipe Harry se sinceró totalmente con Oprah, la magnate que tiene una gran habilidad para las entrevistas y conseguir que la gente le confíe, además de siempre hacer las preguntas correctas. Esta producción original de Apple TV+ tiene como productores ejecutivos a Oprah Winfrey y el príncipe Enríque y se centrará en la salud mental y el bienestar.
Además del príncipe Harry, en esta serie figuran Lady Gaga, Glenn Close, DeMar De Rozan de los San Antonio Spurs, Langston Galloway de los Phoenix Suns, Zak Williams un defensor de la salud mental, Virginia “Ginny” Fuch, boxeadora olímpica, y el chef Rashad Armstead. A través de sus historias y luchas se pretende desestigmatizar el tema de la salud mental y fomentar la compasión y la honestidad.
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El príncipe Harry, así como su esposa Meghan Markle en los años recientes ha sido el blanco de críticas y del acoso de los medios de comunicación, así como de rumores del interior de la familia real que referían a la complicada aceptación de Meghan en el círculo de los royals. Esto derivó en la salida de Harry y Meghan de la familia real y que Harry poco a poco comience a contar su complicada historia.
Al inicio de The me you can’t see el príncipe Harry charla con Oprah sobre cómo la pandemia ha cambiado al mundo, pero en particular el estado mental de las personas, en el que el encierro ha tenido diferentes efectos en todas las personas, un gran puente para comenzar a hablar sobre la situación por la que el príncipe ha atravesado, desde el fallecimiento de su madre, el acoso de los medios y su lucha con ser una persona especial.
Estas son algunas de las revelaciones del príncipe Harry:
Comenzó terapia en 2017
Harry declara que comenzó a ir a terapia hace 4 años, lo cual Oprah apunta que es relativamente poco, sin embargo, Harry explica que 4 años de terapia es bastante para una persona como él que jamás creyó necesitarla y que el principal motivo para comenzar con ello es que buscaba reconciliarse con su pasado.
Siempre quise ser normal. En vez de ser “príncipe Harry” ser “Harry” a secas.
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El trauma de su madre
Buena parte de la vida de Harry y la familia real se ha desplegado ante el ojo público, y en su pasado un episodio sumamente importante es la muerte de Lady Di. Harry relata memorias del pasado, en particular del acoso mediático que sufría su madre tras la separación y de cómo estaban desprotegidos ante los paparazzi, lo cual ultimadamente culminó con su trágico accidente.
Un sentimiento que siempre resurge es el de impotencia. Ser muy joven. Ser hombre, pero demasiado joven para ayudar a una mujer. Y eso pasaba a diario. A diario hasta su muerte.
El luto compartido
En ese sentido, además de la frustración que acompañaba no poder proteger a su madre, Diana, incluso cuando ella no podía conducir porque las lágrimas se lo impedían, Harry explica cómo después de la muerte de su madre todos estaban en shock y de cómo la familia y él debían compartir el luto con miles de desconocidos que no conocieron a Lady Di realmente.
Compartí el dolor de la muerte de mi madre con el mundo entero.
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La injusticia de la muerte de Lady Di
Pero más allá de compartir el dolor con los demás, un asunto que acompañó a Harry es la situación en la que su madre perdió la vida y cómo el caso fue tratado.
Me enojó mucho lo que le pasó y el hecho de que no… de que no se hizo ninguna justicia. No se hizo nada. Los mismos que la persiguieron al tunel la fotografiaron muriendo en el asiento trasero de ese auto.
Una situación que si bien no se ha repetido en la familia real, Harry ha sido víctima de la persecución de los medios, en especial tras su matrimonio con Meghan y el nacimiento de Archie, su primer hijo, y que el temor por que se repita y en esta ocasión sea Meghan la víctima está presente.
El abuso de la bebida y la droga
Entre sus revelaciones más fuertes se encuentra el del abuso de la bebida y el uso de drogas, que si bien fue documentado en los periódicos británicos, Harry declara que en su búsqueda de sentirse menos mal de lo que se sentía, él estaba dispuesto a beber y drogarse. Además, explica que aunque no bebiera de lunes a viernes, era capaz de beber lo de una semana en un solo día o durante los fines de semana, tan sólo con el fin de cubrir o enmascarar lo que sentía.
Los únicos años de verdadera felicidad
Sin hacer mención al momento actual en el que vive lejos de los protocolos reales, Harry explica que los días más felices de su vida fueron en el ejército. “Sin duda”. En esos 10 años, Harry no era el príncipe que era tratado de forma distinta por su título nobiliario, sino que era uno más que utilizaba el mismo uniforme, que comenzó desde abajo, que nadie trataba diferente, y en especial durante su estadía en Afganistán, donde estuvo lejos de los medios.
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