Por Iván Hernández
Seguramente, te preocupa lo que comen los más pequeños de la casa, aunque a veces sea complicado encontrar algo sano que les guste.
Sí, es importante procurar que mantengan una alimentación balanceada, pero tampoco se trata de caer en métodos como las dietas estrictas.
Últimamente, la dieta cetogénica o Keto, como es conocida, está muy de moda para bajar de peso. Consiste en restringir la ingesta de carbohidratos para agotar las reservas de glucógeno y, con ello, la principal fuente de energía se concentrará en la quema de grasas.
Hay casos de éxito con dicha dieta, sin embargo, poner a los niños bajo este régimen alimenticio puede tener severas consecuencias en su salud.
De acuerdo con los especialistas, la dieta Keto no es buena para los cuerpos en desarrollo y muchos menos para los niños.
Actualmente, si un niño promedio fuera sometido a la dieta cetogénica podría llegar a padecer desnutrición, problemas de crecimiento, piedras en los riñones, reducción en la densidad de los huesos, complicaciones gastrointestinales y aumento del colesterol.
Por eso, siempre es recomendable acudir con un médico especialista y un nutriólogo antes de cambiar nuestros hábitos alimenticios, especialmente si se trata de tus hijos.
