¿Qué es cruelty free?
Un movimiento que busca proteger a los animales de la tortura a la que son sometidos a través de experimentos para elaborar principalmente productos de belleza e higiene personal, así como de limpieza del hogar.
Básicamente se refiere a toda prueba o experimento que involucra un animal vivo que es forzado a algo que le causará sufrimiento, dolor, o daño a corto y/o largo plazo.
Los tipos de experimento animal van desde inyectar sustancias tóxicas, exposición a radiación y gases tóxicos, alimentación forzada, sometimiento a situaciones de estrés deliberadamente, modificación genética y más. Poco a poco las marcas se han hecho más conscientes de la importancia de no lastimar a los animales en el proceso de la elaboración y experimentación para los productos, principalmente en la industria de la belleza.
Cruelty Free no es solo una cuestión de ética y amor por los animales, también es una conducta sostenible dirigida a la preservación de las especies sobre la Tierra.
¿Cómo identificar productos crulety free?
Hoy en día para saber que un producto no fue testeado en animales, tenemos que buscar el sello Leaping Bunny, que es el sello de la asociación Cruelty Free International adoptado por más de 2100 marcas en el mundo.
¿El precio es más elevado?
El tener este certificado no significa que los productos cuesten más, los precios no se afectan y al ser marcas más conscientes en sus procesos y fórmulas ofrecen productos de mejor calidad.
Marcas de belleza que no testean con animales
La marca estadounidense Yes To, que acaba de llegar a México, además de aportarle grandes beneficios a tu piel gracias a sus ingredientes 95% naturales, tiene el sello del conejito y es una marca responsable con el planeta.
En el mundo del maquillaje, también hay excelentes opciones que no testean con animales, como la firma Profusion Makeup.
Además ambas marcas acaban de certificarse por la ONG Te Protejo y ahora forman parte de las marcas oficialmente avaladas por la institución.
Afortunadamente, varios países del mundo ya cuentan con leyes que prohíben el testeo en animales y México acaba de unirse a la lista este mes de septiembre, teniendo como límite 2 años para entrar en vigor como ley, por lo que tenemos mucho que celebrar.
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