El ronqueo es un ritual culinario único. Se trata de una técnica milenaria que hace de la preparación del atún toda una ceremonia.
Etimológicamente, la palabra ronqueo proviene del sonido que se produce al rozar el cuchillo con el espinazo del atún salvaje. Esta extraordinaria carne se convierte en la protagonista absoluta, aprovechándose desde los preciados lomos y ventrescas hasta partes menos nobles, como el tuétano extraído de la médula espinal o los morrillos, mormos y contramormos de la cabeza.
El método de despiece manual –tradición tanto en Japón como en España– está estrechamente vinculado a la pesca del atún rojo con la técnica de la almadraba, llegada a las costas españolas hace más de tres mil años a través de los fenicios, y posteriormente perfeccionada en época árabe, durante la que se desarrollaron exponencialmente los puertos pesqueros de la zona.
La magia detrás del ronqueo reside en la exactitud para identificar, cortar y agrupar la carne del pescado. Este arte, que parece incluso una ciencia, pasa de padres a hijos, por lo cual existen auténticos especialistas en la materia reconocidos internacionalmente.
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Edén único para una experiencia inolvidable
En el paraíso terrenal que es Banyan Tree Mayakoba, los amantes del buen comer y el buen vivir fuimos testigos y partícipes de esta tradición única, como parte del evento ILTM, donde hoteleros y agencias de viajes de todo el mundo se reunieron bajo el cálido sol de la Riviera Maya.
La experiencia se desarrolló en el mundo de sofisticación, arte culinario auténtico, impecable servicio, ambiente inolvidable y alma imperdible que es el nuevo beach club Sands de Banyan Tree Mayakoba.
Sands es un club de playa con ambiente cálido y chic, que además tiene las mejores vistas del resort. El que podríamos definir como un edén culinario caracterizado por su espectacular diseño y estilo único, se une a la colección de odas al arte gastronómico del resort.
En este espacio, la naturaleza convive con las comodidades y los lujos en total armonía, pues está diseñado para recibir la brisa marina, acariciando los sentidos en su totalidad con su espectacular arquitectura exterior y el hermoso decorado de sus espacios.
Mientras nos dejamos consentir, el mar y el cielo se fusionan ante nuestros ojos, creando momentos de relajación y diversión sin igual.
El maravilloso y talentoso chef ejecutivo de Banyan Tree Mayakoba, Alfonso de la Dehesa, logra siempre, con cada platillo, transportarnos a mundos de placer, crear emociones y hacernos partícipes en una orquesta culinaria que llega a un crescendo irresistible en momento de perdición total cuando el alimento pasa por nuestros labios.
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