Al apagarse las luces del recinto, existe un momento de emoción pura entre los asistentes. Seguro sabes bien de qué hablo, esa antesala a la adrenalina pura que pone los nervios en su punto de ebullición y detona cuando ves a tus figuras favoritas caminar hacia su lugar en el escenario y empiezan a hacer lo suyo. En mi caso, siento el doble de emoción cuando aquellos que suben son personas con las que he tenido el gusto y el honor de compartir años y años de aventuras musicales.
Estoy hablando de la mastodónica banda mexicana S7N y me atrevo a decir que son nada menos que la banda más importante de heavy metal de todo el país en la actualidad. No tengo pruebas, tampoco tengo dudas y aunque sea un título que muchos consideren discutible, sin pensarlo se los asignaría las veces que fueran. 10 años pasaron por la banda y los llevaron de soñar en grande desde una colonia tranquila al sur de la ciudad, a recorrer un sinnúmero de países, ciudades, festivales y escenarios para consagrarlos como uno de los actos headliners que cambian la historia del metal en México con cada página que escriben.
No es de extrañarse, S7N es una banda que cuida cada aspecto de su línea de producción y entiende perfectamente cómo es el camino para llegar a un buen puerto sin perder de vista la pasión por la música ni desapegarse a sus principios y bastó un show de aniversario para recordarlo. En compañía de los newcomers Dread y Sense of Noise, el Foro Indie Rocks! de la CDMX atestiguó una noche que tomó meses preparar y su resultado no defraudó.
Invitados especiales le inyectan sangre nueva a un concierto
Aunque la noche empezó con el DJ Set de Karol Distortion, quien se encargó de calentar a la audiencia con ambientación que incluía canciones de la nueva ola de metal fusión como Electric Callboy, la primera explosión corrió a cargo de Dread. La banda conformada por talentos jóvenes que no rebasan los 18 años tal vez abusa un poco en una influencia demasiado directa y toma páginas de los libros de titanes dosmileros como Linkin Park y Slipknot. Sin embargo, me recuerdan a los inicios de mi propia carrera y lo cierto es que su espectáculo promete evolucionar a una banda promesa en quizá, los headliners de la siguiente generación, una vez que encuentren la madurez musical que a todas las bandas les llega. Será importante ponerles atención en los años venideros (y desde ahorita). Aplausos para Dread.
El previo al plato principal corrió a cargo de Sense of Noise, una banda liderada por los hermanos Chanona, quienes fueron piezas clave en la historia de la banda de la que yo fui parte, Nuclear Chaos. Por ende, aquí está el otro lado de la moneda, reencontrar músicos de mi pasado creo que me ayuda a entender la evolución del enorme talento que muchos poseen. Sense of Noise se mantiene en la misma línea que siempre gustó a sus creadores, el Death Metal Melódico. Aunque se enfrentaron a algunos problemas técnicos de audio y video, se mantienen firmes y demuestran que la nueva música que están creando forma parte de algo más grande. Auguro un buen crecimiento para la banda.
El retorno del rey, S7N celebra 10 años en la CDMX
Entonces, las luces del recinto se apagaron. Esa efervescencia de emociones previas a la adrenalina se hizo presente. La calma antes de la tormenta. De pronto, una sorpresa. Hace un par de años, S7N decidió usar su música con responsabilidad social en un acto que en lo personal admiro mucho. Organizaron “Sin Barreras”, una gira hecha exclusivamente en reclusorios de la CDMX con el fin de utilizar sus canciones para la reinserción social de los internos. El documental homónimo está a punto de ver la luz, pero se nos obsequió un teaser con bastantes historias en él que estoy seguro inspirarán a muchas personas.
En fin, con S7N he podido compartir escenario en muchos eventos, hemos toureado por un par de ciudades en años anteriores, estuvimos juntos en algunos festivales, en una ocasión tocamos en un mash up de músicos y hasta pudimos invitar a Mao a cantar en una de nuestras canciones y se subió un par de ocasiones a cantarla. Tantos años de historia hacen que sienta un orgullo especial al ver a mis amigos subir al escenario y dominarlo por un par de horas. Escuchar golpes directos sonoros como “Double Dealing”, “Innocent Guilty”, “Enemies”, “Circus” o por supuesto, “Blackout” me recuerdan por qué el ahora cuarteto está donde está. Han sido 10 años de puro y absoluto esfuerzo con verdadera pasión.
Como fan de la música extrema, es muy raro ver conciertos con muy buena producción cuando hablamos de bandas mexicanas. No es que sea un requisito imperioso, pero es refrescante ver cómo existen bandas que se atreven a ir un poco más allá con tal de darle un momento inolvidable a los fans. Aprovechar los nuevos recursos técnicos y yuxtaponerlos con cosas básicas pero impresionantes como pirotecnia o cañones de papel coronan un ensamble musical bien trabajado y una actitud de showmen que nota a nota han ido sumando mas seguidores a la lista.
En conciertos como este, muchos encontramos nuestro hábitat natural. Estamos tan acostumbrados a convivir entre las mismas personas en la industria musical que son casi una familia, los venues que ocupamos se vuelven nuestro hogar y las consolas, amplificadores, bocinas y todo el equipo de producción se transforman en nuestro pan de cada día. Es muy difícil que un concierto logre hacer una verdadera impresión cuando estás tan acostumbrado a vivirlo en tu día a día… y S7N lo logra con creces. Canciones que conocí desde su estreno se mantienen vigentes y sorprendentes cuando una banda de la talla de los capitalinos se sube al escenario y hace lo que ama hacer. Felicidades Mao, Isra, Lalo y Stu. 10 años de atestiguar su ascenso que para nada ha sido en vano, ¡bienvenidos de vuelta!
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