Por Brisa Granados

Nació en Daegu, Corea del Sur hace 50 años. Decidió convertirse en cineasta cuando cursaba la secundaria, influenciado por su familia de artistas: su padre fue diseñador y su abuelo escritor.

Estudió sociología en la Universidad Yonsei a finales de 1989 y fue miembro del club de cine. En aquella época hizo muchos cortos y su proyecto final, Recuerdo en el Cuadro e Incoherencia fue convocado a proyectarse en los festivales internacionales de cine de Vancuover y Hong Kong.

En 2003 su película Memories of Murder, consiguió gran éxito comercial. Tres años después consiguió un éxito similar con The Host. En 2008 realizó Madeo, que hablaba de una madre que luchaba para salvar a su hijo discapacitado de una acusación de asesinato, se estrenó en el Festival de Cannes de 2009.

En 2013 realizó Snowpiercer, una adaptación de la novela gráfica francesa Le Transperceneige. En 2017 compitió en el Festival de Cannes con Okja3 y en el año pasado repitió con Gisaengchung, ganadora de la Palma de Oro, así se convirtió en el primer director coreano en ganar este premio.

Su películas se caracterizan por tener largas tomas de muchos eventos. Cuando alga ocurre en la pantalla, otra cosa pasa en segundo plano y desvía la atención de la audiencia. Siempre acompañadas sus historias de humor negro.Busca crear conciencia social y política. Usa colores brillante y saturados. En Parásitos entrelazó la historia de dos familias, una privilegiada y otra de muy humilde.

Parásitos ganó en cuatro categorías: incluyendo Mejor guión original, Mejor película internacional, Mejor dirección y la categoría más cotizada: Mejor película.