En el más reciente episodio de Keeping Up with the Kardashians, Kim confesó que le tiene mucho miedo a ser captada por los paparazis después de que se dieran a conocer dos imágenes captadas durante las vacaciones de la socialité en Punta Mita, Nayarit.

Su fobia se hizo patente durante el trayecto de Kim hacia la gala del Met en Nueva York, donde la más prominente miembro del clan Kardashian entró en crisis al ver a la gran cantidad de fotógrafos que rodearon el evento.

Su hermana Khloé salió a la defensa de Kim y aseguró que “se veía absolutamente fabulosa en la gala del Met aunque las fotos del viaje a México le sacaron un lado oscuro y de absoluto desdén a los fotógrafos”.