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Florencia, un museo gigante al aire libre

La sofisticación de esta artística ciudad se representa en el Westin Excelsior, un hotel hecho de antiguos palacios entre cuyos dueños llegó a estar Caroline, la hermana de Napoleón.

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Florencia es una de las ciudades más encantadoras del mundo. Famosa por el inmenso poder político y económico que ejerció durante el gobierno de la dinastía Médici, Florencia ofreció al mundo un escenario para grandes maestros artísticos como Miguel Ángel, Filippo Brunelleschi, Leonardo da Vinci y Galileo Galilei.

La ciudad es conocida por su cultura, arte y arquitectura renacentistas y monumentos, cuenta con numerosos museos y galerías de arte, como la Galería Uffizi y el Palazzo Pitti, y todavía ejerce una enorme influencia en los campos del arte, la cultura y la política.

Florencia se puede describir como un “museo al aire libre” gracias a su esplendor y belleza. De hecho, en 1982, la UNESCO declaró al centro histórico de Florencia como Patrimonio de la Humanidad.

The Westin Excelsior, creado con amor

Con la Piazza della Signoria y Uffizi a solo unos pasos de distancia, The Westin Excelsior se encuentra en el centro de la cultura florentina. Un portal a las maravillas de esta bella ciudad –el corazón del arte de Europa–, este lujoso hotel se alza a las orillas del río Arno, sobrevolando toda Florencia.

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Una gran cantidad de recuerdos históricos –siete siglos de historia florentina– está asociada con el área en la que se encuentra el edificio, que ahora alberga uno de los hoteles Westin más emblemáticos del mundo.

Los antiguos palacios que componen el hotel, una vez propiedad –en parte– de la hermana de Napoleón, Caroline, fueron unificados y decorados en 1927. Las habitaciones están diseñadas cada una en uno de estos tres estilos: florentino del siglo XVII, toscano del siglo XVIII e imperio.

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Creado con amor, esta joya del mundo hotelero fue mi portal ideal para sumergirme en lo más auténtico y fascinante de Florencia, desde la impresionante suite presidencial de este bello hotel. Ubicada en la planta superior, elegantemente diseñada y compuesta por un gran dormitorio, una sala de estar y una terraza de 70 metros cuadrados, con una magnífica vista sobre la plaza Ognissanti, esta suite es un sueño. Con elegantes muebles de hierro forjado y pisos de baldosas de terracota, la sofisticación de esta artística ciudad está presente en cada rincón.

Un sueño hecho realidad, Florencia se presenta frente a nosotros como una imagen surreal. Con el bello Ponte Vecchio reflejado en las aguas del río Arno y el duomo reluciente a la distancia, esta ciudad centro de cultura y arte, es única en el mundo y nos enamora perdidamente.

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