Redacción: Central/ Fotos: Cortesía
Desde su textura, color y aroma, el café nos conquista y nos acompaña en nuestro día a día. Ni qué decir de la sensación que nos provoca, y ese sabor tan especial que ha mutado a través de los años y que disfrutamos cada mañana.
Pero, ¿alguna vez te has preguntado de dónde viene?
Se dice que el café nació en el siglo IX, cuando un pastor que cuidaba a sus cabras mientras pastaban, notó que se ponían eufóricas debido a un pequeño grano que comían. Dicen que la curiosidad mató al gato, pero no fue así con el pastor, quien decidió probar estos y, así fue como nació el café.
Sin embargo, historias como ésta sobran, pues hay muchas que cuentan este génesis a su manera; ¡ah!, pero eso sí, todas con un tronco en común: “la casualidad”, ya que algunos afirman que fueron los monjes quienes lo descubrieron.
Lo que sí se sabe, es que el lugar cuna del café, fue también la cuna del hombre: África. Se dice que se descubrió en Abisinia, Etiopía, donde se distribuyó rápidamente a la región árabe y posteriormente a la India. Sin embargo, fueron los holandeses quienes dieron un paso adelante explotando los plantíos de sus colonias en Ceilán e Indonesia.
Ahora que sabes algo más de ese delicioso elixir que nos revive cada mañana, por qué no disfrutar de una exquisita taza con Nespresso, que tiene sabor de origen puro gracias a su cápsula edición limitada Tanim de Chiapas. ¡Ah!, ¿el secreto? Que ha sido procesado 100% en nuestro país.
¡Salud!