Redacción: Central
Desde las alturas, Nördlingen luce como un pueblo tranquilo, pero cuenta la leyenda que hace 15 millones de años, a una velocidad de 25 km por segundo, un asteroide de 1 km de ancho golpeó el suelo con tanta fuerza que se creó un cráter de 26 km de diámetro, que es justo en donde hoy se encuentra el poblado.
Por el calor y la presión a la que fue sometido el lecho rocoso, las burbujas de carbón que contenía en su interior terminaron convirtiéndose en diamantes.
La piedra llamada Suevita, está salpicada de diamantes y fue con la que se construyeron los edificios locales, haciendo de Nördlingen uno de los pueblos más increíbles de la historia.
Con 0,2 mm de tamaño, estos diamantes, son casi invisibles al ojo humano y fue hasta hace poco que los habitantes se enteraron del origen del cráter.
A pesar de que ellos no parecen entusiasmarse con la historia tan impactante que tiene su pueblo, personas de otros países, geólogos, astrólogos y reporteros han visitado este lugar que se conecta con todos los eventos de hace millones de años.
