Richard Wayne Penniman, conocido mundialmente como Little Richard, falleció a los 87 años a causa de cáncer, según dio a conocer su hijo Danny a la revista Rolling Stone.
Anteriormente, el artista ya había sufrido un ataque al corazón, padecía una severa ciática y problemas crónicos en la cadera.
El legendario cantante y pianista nos dejó éxitos como “Tutti Frutti”, “Long Tall Sally”, “Rip It Up”, “Lucille” y “Good Golly Miss Molly”, por mencionar algunos.
Su carrera alcanzó la cima durante la segunda mitad de los años 50, cuando logró combinar a la perfección la música góspel y el rythm and blues con el rock.
La energía que desprendía en el escenario y su estilo que rompía con los estereotipos de género fueron su sello característico. Y cómo olvidar su icónico grito “¡Womp-bomp-a-loo-bomp-a-lomp-bomp-bomp!”.
Los míticos Elvis Presley, Buddy Holly, James Brown, Quincy Jones, David Bowie, The Beatles, The Rolling Stones y Elton John han reconocido la influencia de Little Richard en su música.
En 1992, lanzó sus últimas grabaciones “Shake It All About” y “Little Richard Meets Masayoshi Takanaka”.
Descanse en paz, Little Richard.