Durante la visita tuvimos la oportunidad de platicar con Esther Bleier, fundadora de la marca; su hija Sharon Bleier, directora de Innovación y Desarrollo; y Fernando Martínez, director de Operaciones del grupo, que empezó como garrotero ¡hace más de 30 años!
“Garabatos no es una franquicia fría, es nuestra casa. Empezamos sin dinero, desde un módulo hecho de tablaroca. Mi esposo era el que hacía las galletas, las repartía, entre los dos levantamos esto”, nos contó Esther.

Más luz, más aire, más calidez
Desde que entras, el cambio se nota. Todo se siente más abierto, moderno y natural. Hay maderas claras, plantas, vitrinas nuevas, colores neutros… una atmósfera cálida que te invita a sentarte sin prisa. Todo pensado para que la comida se vea y se sienta mejor.
“Los pasteles son como joyas. Quería vitrinas que los hicieran lucir como tal”, nos dijo Sharon, quien lideró toda la renovación.

El cambio empezó con una vitrina… y terminó en un nuevo concepto
La historia de esta renovación empezó con algo tan simple como el deseo de mejorar la forma en que se presentaban los postres. Pero eso fue solo el inicio. Lo que vino después fue un rediseño completo del restaurante, del ambiente y hasta de la carta, con nuevos platillos pensados para una generación que busca más que solo comer.
“Regresamos a la esencia, pero con una mirada fresca. Escuchamos a nuestros clientes, a nuestros colaboradores y así nació este nuevo Garabatos”, nos contaron.

¿Y qué probamos?
Un poco de todo. Clásicos que nunca fallan y nuevos favoritos que seguro van a conquistar: quesabirrias, tacos gobernador, pechuga a la parmesana.
Y para cerrar, los postres: volcán de chocolate, tiramisú y, por supuesto, las clásicas galletas Garabatos.
Otra novedad que nos encantó fue el nuevo carrito de bebidas, que incluye desde mezcalitas hasta cantaritos. Perfecto para acompañar cualquier platillo.
FOTO ALIMENTOS.PNG / Tacos gobernador, mezcalita, galletas/Cortesía
Un clásico que sabe evolucionar
Con más de 50 años de historia, 17 restaurantes y 9 boutiques, Garabatos demuestra que sí se puede cambiar sin perder lo que te hace especial. La sucursal de Perisur es prueba de eso: un lugar completamente renovado, pero que sigue oliendo a café, a galletas recién horneadas y a sentirte como en casa.
Visita Garabatos
Dónde: Consulta aquí todas sus sucursales
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