Un video de realidad virtual, creado por científicos estadounidenses, deja ver el daño pulmonar causado por el virus COVID-19:
Se trata de un paciente relativamente sano, de 59 años, inicialmente asintomático y considerado fuera de los grupos de riesgo –aunque tenía antecedentes de hipertensión leves–. Una vez que las complicaciones aparecieron, el hombre tuvo que ser conectado a un ventilador mecánico y a un oxigenador sanguíneo.
![Captura de pantalla 2020-05-19 a la(s) 12.19.36.png](https://tvazteca.brightspotcdn.com/dims4/default/3a52a10/2147483647/strip/true/crop/1196x513+0+0/resize/1024x439!/format/jpg/quality/90/?url=http%3A%2F%2Ftv-azteca-brightspot.s3.amazonaws.com%2F09%2F8f%2F93f38f82410bbbd35305124e0137%2Fcaptura-de-pantalla-2020-05-19-a-las-12.19.36.png)
Lo que puede verse en el video son concentraciones gráficas amarillas, las cuales representan las zonas de inflamación.
![Captura de pantalla 2020-05-19 a la(s) 12.19.21.png](https://tvazteca.brightspotcdn.com/dims4/default/c32defe/2147483647/strip/true/crop/1044x618+0+0/resize/1024x606!/format/jpg/quality/90/?url=http%3A%2F%2Ftv-azteca-brightspot.s3.amazonaws.com%2F8e%2F14%2Fa84b86bf40188bb80da2ae57ae7f%2Fcaptura-de-pantalla-2020-05-19-a-las-12.19.21.png)
Daño irreversible
Si bien el índice de supervivencia es alto –cuando las condiciones sanitarias y disponibilidad hospitalaria es amplia–, está demostrado: las personas que se recuperan de COVID-19 pueden perder entre 20% y 30% de su capacidad pulmonar, así como generar fibrosis o cicatrices en los tejidos de estos órganos –similares a las que causa el virus de la influenza.
No nos cansaremos de decírtelo: quédate en casa.