Por Yazmín Ruíz
A casi todas las mujeres nos gustan los zapatos, podemos ir de tienda en tienda viendo los aparadores y volviéndonos locas con los miles de pares que llegamos a encontrar. Tacones, balerinas, tenis, sandalias y bla, bla; pero cuando estamos a punto de escoger los tacones que más nos gustaron, pensamos: “¿qué estoy haciendo? Estos zapatos me lastiman hasta el infinito” y, de repente, caminamos sigilosamente y los dejamos en el mismo lugar en que los encontramos.
Entonces, llegamos a casa supertristes porque no sabemos qué más hacer para poder usar nuestros tacones favoritos sin tener que morir en el intento. Por eso, queremos que cheques estos 5 tips que traemos para ti:
Los nuevos
Los zapatos, sobre todo si son tacones, suelen lastimarte demasiado cuando son nuevos, nosotros te recomendamos que los “aflojes” dos semanas antes la fiesta para la que los quieres; si te arriesgas a comprarlos el mero día, mantente consciente de que puedes sufrir en el intento de usar los zapatos todo el día.

¡Que sean de tu talla!
No importa cuánto te hayan gustado, si no son de tu talla, ¡NO LOS COMPRES! Nos ha tocado ver a niñas que se ven divinas con su outfit pero a la hora de caminar van chancleando los zapatos y créenos, ¡eso se ve nefasto! Además de que corres el riesgo de caerte enfrente de tu crush, y, ¡que oso!

Siéntate, tienes derecho
Sabemos que, obvio, quieres presumir lo linda que te ves con tus tacones que van a la perfección con el outfit que escogiste; pero en ningún lado hay una regla que diga que tienes prohibido sentarte si estás usando este tipo de zapatos, por eso, descansa. Lo mejor que puedes hacer es sentarte un ratito y estirar las piernas (discretamente), luego vuelve al glamour sin problemas.

¡Adiós joroba!
Lo peor que puedes hacer es encorvarte. Si quieres lucir elegante y perfecta usando tacones, mantente erguida, esto te ayudará a conseguir equilibrio y cansarte menos rápido.
El tamaño
Te recomendamos que si tu propósito es usar estos zapatos todo el día, compres tacones que midan 5 o 6 centímetros, de lo contrario, puede ser una tortura.

¡Listo! Ya puedes salir y lucir como una nena linda por las calles de la ciudad.