Cultura

El perro de Picasso, el amor más grande del pintor

Por: Beatriz Esquivel 07 abril 2022 • 3 minutos de lectura

Picasso fue un gran amante, tanto de mujeres como del arte y, por supuesto, de los animales. Esta es la historia del perro de Picasso, Lump.

Compartir:

perro de picaso lump con pablo picasso
Detalle de portada del libro Picasso y Lump de David Dougas Duncan / Amazon

Pablo Picasso es reconocido por ser el gran exponente del cubismo y ser uno de los artistas más influyentes de su época que hasta la fecha sigue siendo objeto de estudio e inspiración. Fuera del plano del arte, Picasso también fue muy reconocido por ser un gran amante, múltiples mujeres lo acompañaron a lo largo de su vida, actuando como una suerte de musas, aunque las relaciones estuvieran lejos de ser cuentos de hadas… sin embargo, sí hubo un gran amor en la vida de Picasso no sólo fue el arte o las mujeres… sino sus perros.

El perro de Picasso

Aunque hay un perro en la biografía de Picasso que suele ser resaltado, lo cierto es que en la vida del pintor español hubo muchos perros. El gusto de Pablo por los animales no era secreto y fue así que en su vida tuvo a su alrededor perros de todo tipo de razas… aunque esto no quiere decir que todos fueran exactamente suyos, pues en ocasiones los dueños de estos perros eran otras personalidades cercanas de Picasso.

Lump, es el perro más famoso de Picasso… aunque en realidad Lump era de David Douglas Duncan, un fotógrafo de guerra que dada su cercanía con Picasso también retrató muchos de los aspectos de la vida de Picasso y de su segunda esposa Jacqueline Roque.

Portada del libro de David Douglas Lump, Picasso y Lump
Portada del libro de David Douglas Lump, Picasso y Lump / Amazon

Te puede interesar: Los 7 lados de Pablo Picasso

El perro era un salchicha que Ducan compró para hacerle compañía a otro de sus perros, Kubla Khan, un lebrel afgano, sin embargo, se cuenta que ambos perros no llevaban una buena relación, lo cual hizo hasta cierto punto más sencilla la decisión de Duncan de dejar a su perro bajo el cuidado de Picasso. Sin mencionar que su trabajo de fotógrafo lo obligaba a viajar, lo cual se complicaba con un perro como Lump. Ducan después procedería a publicar una serie de libros fotográficos tanto de Picasso y su trabajo, como de Lump y Picasso, una de las principales fuentes existentes sobre la relación del perro y el artista.

Cuenta la historia que cuando Lump y Picasso se conocieron un 19 de abril de 1957 en el hogar de Picasso en Cannes… y la unión de estos fue instantánea. Picasso incluso hizo un cuadro de Lump sobre un plato de comida, que le fue regalado a Duncan y que posteriormente fue donado al Harry Ransom Center en la Universidad de Texas.

Más tarde, cuando David Douglas estaba por retirarse del hogar de Picasso y Jacqueline, el pintor, aparentemente, cargó a Lump y le preguntó si podría quedarse con él, una petición a la cual Duncan no pudo negarse. Así fue que Lump pasó seis años viviendo con el pintor y siendo su compañía durante sus ratos de soledad al pintar.

Lump inmediatamente decidió que ese sería su nuevo hogar. Él más o menos dijo ‘Duncan, esto es, me quedo aquí’.
David Douglas Duncan
Pablo Picaso, Las Meninas, 17/11/1957
Pablo Picaso, Las Meninas, 17/11/1957 / Museo Picasso

Te puede interesar: Piedad y terror en Picasso: El camino a Guernica

Sin embargo, a pesar de que la vida de Lump en el hogar de Picasso era privilegiada –se dice que Picasso consentía al perro y lo trataba no como mascota, sino como si fuese otra persona– la edad comenzó a hacer estragos en el perro salchicha, este comenzaba a tener un problema en su espina dorsal –una condición común en perros de dicha raza– que le impidió usar sus piernas traseras. Sin embargo, Duncan se encargó de buscar un veterinario que pudiera tratarlo llevándolo incluso hasta Alemania para ello. Se dice que gracias a ello Lump vivió por 10 años más y lo hizo casi a la par de su segundo dueño, pues Lump murió 10 días antes que Picasso, un 29 de marzo de 1973.

Picasso una vez dijo, ‘Lump no es un perro, no es un hombre pequeño, es alguien más.’ Picasso tuvo muchos perros, pero Lump fue el único que tomaba en sus brazos.
Duncan

El perro de Picasso en su arte

La aparición más famosa de Lump en el arte de Pablo Picasso es en la reinterpretación de Las meninas de Velázquez, que fue ampliamente trabajada por el pintor… aunque está claro que quizá no se decidía a poner a su adorado Lump en el cuadro, pues de 44 estudios de la obra, el perro sólo aparece en 15. Asimismo, existe un dibujo, casi un garabato de Picasso, Perro , que con un solo trazo crea la figura del perro salchicha.

las-meninas-pablo-picasso-estudio.jpeg
Pablo Picasso, Las meninas, 17/08/1957. / Museo Picasso

Te puede interesar: Los 10 hechos más curiosos en la historia del arte

Suscríbete aquí a nuestro Newsletter para que estés al día con nuestros contenidos.

Etiquetas

×
X