Redacción: Central
Actualmente, este acto de entrechocar las copas, conocido como brindis, tiene la intención de manifestar buenos deseos y alegría a la otra persona con la que se celebra. Sin embargo, esta tradición viene de una antigua costumbre que nada tiene que ver con las buenas intenciones.
Se dice que en la Edad Media, por diversos intereses, eran comunes los envenenamientos. Por eso, cuando se celebraban los banquetes, y por miedo a ser asesinadas a causa de alguna sustancia en sus bebidas, las personas chocaban sus copas con el fin de que el líquido salpicara y cayera en la copa de compañero.Si la otra persona bebía sin problema, significaba que no había echado ningún tipo de veneno en la bebida. Si por el contrario, la persona se abstenía de beber, ese acto podía ser calificado como sospechoso. ¡Qué bueno que ya no estamos en el medievo!
En esta época decembrina y de fiestas por doquier, no pueden faltar los brindis. Haz ese momento de paz y amor más agradable en compañía del champagne de tu preferencia.