El Internet nos ha permitido conectarnos con personas de todo el mundo y acercarnos los unos a los otros, pero también ha causado que algunos puedan aprovecharse de las personas con estafas tan conocidas como la del famoso príncipe de Nigeria que necesita de tu ayuda… Tinder, la famosa app de citas no escapó de este tipo de comportamiento negativo y lejos del catfishing, hay personas que han perdido dinero en elaboradas estafas.
De qué trata “El estafador de Tinder”
Bajo el título de The Tinder Swindler, esta película documental cuenta el caso de tres mujeres que fueron víctimas de fraude. Cada una de ellas a su manera cayeron enamoradas de un hombre, en apariencia billonario, pero que en la realidad no tenía ni un centavo propio.
¿Su nombre? Simon Liviev, cuyo nombre real es Shimon Yehuda Hayu y que emigró de Tel Aviv a Europa después de que en su país natal fue acusado de fraude. Fiel a su fama, Liviev comenzó un elaborado plan para conocer mujeres vía Tinder, enamorarlas y consiguiendo que éstas le prestaran cuantiosas sumas de dinero para mantener la apariencia de un estilo de vida de un millonario.
Cómo estafaba a las mujeres
Tal fue el caso de Cecilie Fjellhøy, con quien comienza el documental, una mujer en busca del amor que quedó completamente impresionada por Liviev. Ella cuenta que en su primera cita, no sólo la llevó a un buen restaurante, sino que la invitó a viajar en jet privado, mostrándole su acceso a lujos que cualquier pensaría que sólo un millonario puede tener. Cimentando así la idea de que Liviev tenía solvencia económica para cubrir cualquier préstamo.
Mediante mensajes, videos y llamadas, Liviev enamoraba a las mujeres, las hacía sentir especiales, viajaba a visitarlas o las invitaba a viajar a las ciudades donde él se encontraba. Una vez las mujeres se encontraban enamoradas de él, entonces comenzaba el mayor engaño. Simulaba estar en problemas serios, con artículos periodísticos falsos, y sin acceso a sus cuentas bancarias para evitar que lo rastreara; la situación se agravaba cuando Simon compartía una serie de fotos suyas y de su “guardaespaldas” con sangre y golpes.
Su vida en riesgo y sin acceso a sus cuentas, eran el gancho perfecto para entonces provocar que las mujeres le prestaran dinero o dieran tarjetas de crédito. Todas ellas, confiadas por el estilo de vida que Leviev había mostrado le prestaban dinero sin pensarlo dos veces (sin mencionar que movidas por el amor y cariño). Pero ninguna esperaba que este hombre no fuera capaz de devolverles ni un centavo.
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El esquema Ponzi
Después de que la historia de Leviev ganó notoriedad gracias a una investigación del periodico noruego VG, se descubrió que la lista de personas que Simon había defraudado era mayor de la que esperaban… pero, ¿cómo es que Leviev logró estafar a tantas mujeres?
Los investigadores pronto se dieron cuenta que la estafa no era más que un esquema ponzi, muy común en el mundo de las inversiones. Para quienes no tengan claro el concepto, el esquema ponzi en términos muy sencillos es una estafa en la que se hace creer que un negocio es particularmente rentable, cuando la realidad es que el ingreso de nuevos inversores es lo que permite que se le paguen ganancias a los inversores anteriores. Su base se encuentra en seguir encontrando nuevos inversores que permitan que el flujo de dinero continúe.
Aplicado al caso de El estafador de Tinder, lo que Simon realizaba es que con el dinero de una mujer pagaba la renta de un jet privado, los carros Rolls Royce, las fiestas, cenas y más regalos lujosos, todo lo que necesitaba para hacerse pasar por un millonario. Una vez conseguía enamorar a la segunda mujer, entonces comenzaba a recibir dinero de ésta para poder repetir lo mismo con las siguientes; esto sin ni una sola vez devolviéndole ni un céntimo a las mujeres previas que le habían prestado dinero.
Qué pasó con el estafador de Tinder después del documental
En el documental podemos ver que después de la investigación y una condena de 15 meses de prisión, Simon Liviev pudo salir libre y que en apariencia ha cambiado su modelo de estafa por Tinder al coaching. Un final bastante insatisfactorio para todas sus víctimas en las que ven a su estafador en total libertad y con la facilidad de continuar engañando a las personas.
Por otro lado, Tinder desactivó la cuenta de Simon Leviev y la borró para evitar que el hombre siguiera estafando personas a través de la plataforma… Al tiempo que Leviev sigue manteniendo la versión de que él es inocente y nunca le robó dinero a sus acusadoras. Incluso el hombre cerró su cuenta de Instagram que ganó miles de seguidores cuando el documental se estrenó en Netflix, pero no sin dejar un mensaje en el que expresó que él contará su versión de la historia.
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