Por Brisa Granados
Andrea Martí visitó Tokio, Osaka, Kioto e Hiroshima, y estando ahí participó en algunas competencias deportivas. “Jugamos tochito, y estuvo increíble mezclar integrantes japoneses y mexicanos. Fue muy divertido porque ellos no entendían inglés y español, ni nosotros japonés. El choque cultural no se interpuso para divertirnos juntos”.
Martí aprovechó para conocer también una de las ciudades más místicas de Japón, Hiroshima: “Es un lugar histórico, estar ahí fue algo energético, raro. La gente tiene una mirada súper fuerte, un poco gris”.
Sobre Kioto nos comentó: “Mi lugar favorito de todo Japón porque todo es súper tradicional, las chicas en kimono están increíbles, una experiencia inolvidable”.
Después de esta experiencia la actriz desea mudarse a Japón. “Me fascina que allá aun existe el cortejo a la mujer. La ropa es lo máximo, los paisajes. Tokio es la ciudad con más tecnología, edificios enormes, altísimos”.
Pero no todo fue perfecto. “Sufrí mucho con la comida, más con el desayuno, porque no se me antojaba desayunar sardinas con arroz, ja, ja, ja”.
Durante un partido de futbol fue simpático para Andrea notar la diferencia entre los pamboleros mexicanos y los japoneses. “Fui sorprendente ver a una sociedad tan estructurada y no gritar en un estadio, ja, ja, ja”.