¿Cómo llegó a ti la oportunidad de integrarte a La Casa de las Flores 3?
Por medio de u casting muy particular, me sentía en un reality show. Estábamos todos los preseleccionados juntos y eran rondas y rondas. Fueron disminuyendo el grupo hasta que quedamos Isabel, Tiago y yo en una sala de casting frente a Manolo y Luis Rosales. En ese momento ya el milagro había ocurrido, ¡Éramos los tres!
¿Cómo fue ser dirigido por Manolo?
Es la segunda vez que trabajamos juntos, entonces puedo decir que tenía algo ganado de confianza y menos nervios. Pero en el otro lado el reto era mucho mayor. Mi trabajo tenía que ser preciso, en la forma del personaje, su voz, cuerpo etcétera. Y sólo puedo agradecerle a Manolo su generosidad, confianza y paciencia en el set.
¿Con quién de tus compañeros hiciste más química y por qué?
Pues digamos que ya teníamos una historia detrás, ja, ja, ja. Entonces ya Isabel tenía terreno ganado, cuidado con lo que imaginan. Ya nos conocíamos de otros castings justamente y en todos yo me había sentido conectado con ella, con esas miradas que no siempre te llegan en el set. Con la primera mirada entendí ese click, es una actriz apasionada y divertida ya quiero otro proyecto juntos.
¿Viste las temporadas anteriores?
Por supuesto para mí Manolo ya era fantástico desde antes de conocerlo: sus obras de teatro y sus películas. Debí haber visto la primera temporada cuatro veces y no exagero y una de sus películas más de 30 y esta noche podría repetirla.
¿Qué piensas de la serie?
Nos presentaron a una familia bien aparentemente en la primera, conocimos realmente el lado oscuro y lo profundo de sus miembros en la segunda. Por eso llegamos con la tercera a encontrar en el pasado todas las razones que los llevaron a este presente. Está imperdible.
¿Qué quisiste proyectar de ti en Salo?
Absolutamente nada. Todo lo contrario es tan lejano a Javier que tuve que ocultar todo lo que soy. Ni respiramos a la misma velocidad. Menos vamos a ver la vida parecido. Si le doy algo a Salo de Javier lo termino hasta cambiando de religión, ja, ja, ja.
¿Por qué no podemos dejar de ver esta temporada?
Porque una familia tan particular como los De La Mora tienen un pasado oscuro, húmedo y profundo como las raíces que alimentan todas esas flores, veremos de que se alimentaron y como se educaron. De tal palo tal astilla dice el dicho. Veremos que tanto se cumple cuando veamos el pasado.
La Casa de las Flores 3
A patir del 23 de abril por Netflix.