La temporada final de “La casa de las flores” nos enfrenta a una familia de la Mora más real, humana, como todas. Y a los típicos clichés sociales que lamentablemente no pasan de moda: la preocupación por una posición social privilegiada, la discriminación a los homosexuales, la necesidad de pertenecer.
Esto fue posible intercalando escenas de la época de los 70, cuando Virginia, Ernesto, Carmela y Salo eran jóvenes, con la situación actual de la familia de La Mora. Sobre todo esto nos platicó Tiago Correa.
¿En qué te idénticas con Ernesto de joven, tu personaje y en qué no?
Al Igual que él soy una persona muy alegre, enamoradiza, aventurera, de muchos valores familiares y despojado de prejuicios que disfruta la diversidad.

¿Qué fue lo que más disfrutaste de las grabaciones?
El elenco y la dirección de Manolo. Mis compañeros son todos muy talentosos y profesionales y en el set entregaban lo mejor de ellos lo que generaba una fuerza sincrónica haciendo que cada escena fuera muy potente. Me divertí y nos reímos mucho. Es delicioso cuando eso sucede.
¿Habías visto las temporadas anteriores? ¿Qué te gustó más?
Si, claro, ¿quién no? Cuando vi la serie me fascinó el lenguaje creado por Manolo, toma el melodrama clásico de las telenovelas y lo satiriza con un humor negro ácido que nos permite hablar de temáticas tan necesarias como la opción de genero, el sexo, las drogas, el doble estándar y el machismo pero riéndonos de nosotros mismo, que para mí es la mejor forma de asumir y producir cambios sociales.

¿Cómo fue ser dirigido por Manolo Caro?
Manolo es un placer como director. Su mundo creativo es fantástico. Es un director que respeta mucho el trabajo de las actrices y actores y te permite proponer constantemente desde tu personaje y desde ahí te guía con una sutileza a provocarte actoralmente en cada situación.
Compártenos una anécdota dentro del set:
En la escena en que Ernesto ve a Virginia y Pato tener relaciones, originalmente tenía que verlos por la puerta e irme de ahí, pero en los ensayos comenzamos a bromear con Manolo, que no podía irme, que tenia que aprovechar el momento, ya que Ernesto no tenía a su Carmelita con él. Y entre broma y broma Manolo me dice “vas”. Y yo: “no, espérate, cómo crees”. Manolo me dice: “si vas, llegas y te quedas ahí mirándolos y te metes la mano suavemente”, después gritó “¡Acción!”. Corrí a mi punto de inicio de escena y la hicimos una sola vez, al corte todos aplaudieron y comenzamos a reírnos.
Tiago Correa es un actor chileno de 38 años y también lo has visto en: “La Reina del sur 2”, “Santiago Paranormal” y “Un ángel con diablo”. Síguelo en:
@tiagorodrigocorrea