Cuando hablamos de vino y maridaje, posiblemente lo primero que viene a nuestra mente es que el vino tinto va con las carnes rojas, el blanco con mariscos, y los vinos espumosos con postres o pasteles.
Sin embargo, esto no es del todo cierto, ya que el maridaje es mucho más complejo.
El maridaje es un arte donde las texturas, aromas y sabores de cada bebida y platillo deben complementarse y potenciar sus cualidades. En ningún momento deben dominar, ni saturar el paladar.
Por ejemplo, en el caso de las aves, sobre todo el pollo, se puede optar por un vino de uva Chardonnay, y para un cordero, un Cabernet Sauvignon.
Pero, ¿qué pasa cuando los alimentos son dulces? ¿Cómo se debe maridar con postres e incluso chocolates?

El vino y el chocolate
De acuerdo con el sommelier José Luis Umaña, de la vinícola El Cielo Valle de Guadalupe, el chocolate y el vino forman un perfecto maridaje y depende del paladar y gusto de cada persona.
“La elección del vino es algo muy personal y tiene mucho que ver con tus gustos en temas de maridaje, lo que funciona, funciona, y lo que no funciona, no funciona”.
“Sin embargo, si vas a pedir un chocolate semiamargo, tienes que pensar en un vino que definitivamente haya pasado por barrica, porque la barrica le va a dar una potencia y una estructura mayor”.
En el maridaje una buena opción es agregar elementos para tener una armonía entre el vino y los alimentos.
“Si un vino te da notas de fruta de fresas, de frutos rojos y se apoya con las notas de la barrica, qué tal qué a ese chocolate semiamargo le agregas algo de frutos rojos, canela u otras especias”.
El chocolate y el vino siempre quedarán perfectos si el chocolate tiene grandes cantidades de cacao y un sabor amargo.

Pero, si se desea maridar con un chocolate con leche, puede ser un poco difícil.
“El chocolate con leche es un poquito más complicado porque ya pierdes los amargos del cacao por lo dulce del azúcar que se agrega a los chocolates, entonces ahí yo me iría un vino mucho más sencillo y tenue; pero no recomendaría maridar un chocolate con vino.
En el caso de los postres, el sommelier José Luis Umaña recomienda probar y arriesgarse a los contrastes.
“En una tarta de manzana puedes pensar en un vino que tenga notas de manzana con algo más como mantequilla, entonces podría pensar en un Chardonnay con barrica”.
“Definitivamente no hay una ciencia en el maridaje, es un arte y está abierto a posibles cambios y sugerencias siempre”.
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