La frase "cada cabeza es un mundo" jamás tuvo tanto sentido como cuando hablamos de fantasías sexuales. Lo mejor de fantasear es que cada fantasía está hecha a nuestro gusto y medida, porque lo único que se requiere es imaginación.
Existe una cultura social que reprime las fantasías sexuales tachándolas de inmorales, no obstante, las fantasías sexuales pertenecen, en primera instancia, a nuestro mundo interior, y en él nadie tiene injerencia.
Esto es lo que hay que saber sobre las fantasías sexuales, qué significa, ejemplos y por qué es tan importante este elemento en el desarrollo de nuestra sexualidad.
¿Qué son las fantasías sexuales?
De acuerdo a diversos expertos en sexualidad y en mente, las fantasías sexuales son una creación de nuestra mente que nos ayuda a estimular la excitación sexual.
Según los especialistas, las fantasías sexuales van evolucionando a la par del desarrollo de nuestra sexualidad, y aunque hay ligeras variaciones entre géneros —estadísticamente, las fantasías sexuales de los hombres incluyen sexo con más de una persona, sexo grupal, sexo en lugares públicos o sexo con personas "prohibidas"; las fantasías sexuales de las mujeres, estadísticamente, están más desarrolladas en el aspecto sexual, sensorial y romántico—, ninguna fantasía sexual es mala, buena, mejor, peor, o inmoral...
La culpa que sentimos cuando fantaseamos sexualmente está impuesta por la sociedad y la preconcepción de la moralidad, pero lo que hay que recordar las veces que sea necesario es que nuestra mente es libre y en ella todo es posible.
Regularmente, las fantasías sexuales se alimentan de eventos pasados, elementos sensitivos que tienen la capacidad de estimularnos sexualmente, y también de la imaginación de escenarios nuevos, lo cual, en palabras de los especialistas, es muy sano porque es una manera segura, divertida y placentera de conocernos sexualmente y nuestras limitaciones mentales. Las fantasías sexuales son la expresión de nuestros deseos sexuales más íntimos, son el terreno más seguro para la experimentación.
¿Qué tipo de fantasías sexuales hay?
Tratándose de material mental y estrictamente personal, las fantasías sexuales no habría por qué catalogarlas o etiquetarlas, pero para efectos de estudio, hay expertos que las dividen en los siguientes tipos:
- Fantasías sexuales eróticas íntimas
- Fantasías sexuales exploratorias
- Fantasías sexuales sadomasoquistas
- Fantasías sexuales de carácter impersonal
- Fantasías sexuales placenteras
Y hay expertos que prefieren dividirlas en dos grandes categorías:
- Fantasías sexuales noveladas
- Fantasías sexuales NO noveladas
En esta última división de tipos de fantasías sexuales es más fácil incluir el resto. Es decir, los expertos dicen que las fantasías sexuales noveladas involucran a la imaginación estrictamente, y ya sabemos que la imaginación se vale de todo, desde el bagaje personal, los recuerdos, las historias que inventamos y nos llevan a la excitación sexual, lo romántico, lo sensual, la seducción, la idealización, etcétera. Todo es válido, cualquier personaje, cualquier escenario... Es tu mente y en ella sólo entras y mandas tú.
En cuanto a las fantasías sexuales NO noveladas, se refiere al tipo de contenido que se estimula a través de los sentidos. Este tipo de fantasías sexuales se centran en nuestras capacidades visuales, auditivas, sensitivas, táctiles, olfativas... Y la memoria también juega un papel importante porque la necesitamos para construir la fantasía. Aquí hablamos exclusivamente de sentidos y sensualidad física; qué es aquello que pertenece a los sentidos que te provoca excitación sexual.
¿Cuáles son las fantasías sexuales más comunes?
Dado que las fantasías sexuales están hechas de contenido personal más idealización más la propia sexualidad, existe un universo entero de fantasías; no obstante, hay que recordar que en nuestra mente también hay contenido colectivo, y ahí es donde entran las fantasías más comunes.
Las fantasías sexuales más comunes de una mujer son:
- Juegos de roles y la excitación de ser alguien completamente diferente
- El morbo, es decir, sentirse expuesta a la mirada no sólo ajena, sino pública
- Las relaciones de poder, ya sea en el papel de sumisa o de dominatrix
- Las fantasías sexuales con otras mujeres, ya que se despierta un erotismo que, aunque nos parece conocido por nuestra condición de mujer, también es completamente extraño en términos de sensaciones
- Encuentros sexuales con desconocidos, aquí se juega el escenario en el que te relacionas con un completo extraño sin apenas pronunciar palabra
Las fantasías sexuales más comunes de un hombre son:
- Sexo en trío, por lo regular con una pareja ya existente y con alguien relacionado a ambos
- Sexo con suegras u otros parentescos de la pareja
- Sexo voyerista, no importa qué rol jueguen
- Sexo grupal, orgías, intercambio de parejas u otras actividades de sexo con más de tres personas
- Ver a su pareja tener sexo con alguien más
- Cosplay
- Homoerotismo
- Bondage
- Ver pornografía con tu pareja
- Tener relaciones sexuales en la oficina
- Experimentar con las posiciones sexuales del kamasutra
- Los squirt
- Grabarse en video teniendo sexo
Los expertos nos dicen que ninguna fantasía sexual es motivo de vergüenza o represión, incluso si ya tenemos pareja y fantaseamos con alguien más...
Cuando hay que acudir a un experto es cuando son muy insistentes en nuestra mente, o cuando instintivamente empiezan a preocuparnos, entonces es momento de acudir a un experto en sexualidad... Por lo pronto, dale rienda suelta a la imaginación; una vez más, te recordamos que las fantasías sexuales son una oportunidad para conocerte mejor.
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