No cabe duda que el futuro de la medicina (y de muchos otros campos) está en la nanorrobótica, prueba de ello son los recientes y prometedores resultados obtenidos por científicos de China y Hong Kong. Aquí, se han realizado pruebas en animales con enjambres de microrrobots, con la finalidad de recorrer sus cavidad sinusal con la finalidad de eliminar bacterias, como la causante de la gripe.
Esto podría representar la transición a las pruebas en humanos, resultando en una eficiente alternativa a la medicina tradicional, dejando de lado la opción de consumir pastillas o jarabes. Así mismo, los nanorrobots podrían ser activados por medio de energía magnética, además que no permanecerían en el organismo de las personas, siendo expulsados a un pañuelo a través de las fosas nasales.

Cada uno de estos artefactos tienen el ancho de, aproximadamente, la mitad del de un cabello humano, y no son mayores en tamaño a una partícula de polvo, dando resultados positivos en pruebas realizadas dentro de algunas universidades ubicadas en el territorio asiático.
Los microrrobots son calentados de forma interna, lo que causa una reacción química que elimina las bacterias que provocan algunas enfermedades y se activa a través de electromagnetismo. Se espera que estos no solo sustituyan el uso de medicamentos básicos, incluso podrían ser utilizados como alternativa a los antibióticos y otros activos.
Los nanorrobots no se limitarán al tejido humano, pues también se pueden activar para tratar bacterias de implantes. Por otro lado, los usos clínicos pueden ser muy variados, incluyendo procesos dentro de áreas específicas, como los intestinos o la vejiga. El uso de microrrobots aún está en fases de desarrollo muy tempranas, pero los expertos estiman que esto podría cambiar en 5 o 10 años.

A pesar del notorio recorrido que se ha avanzado, existen algunos peligros que aún se deben contemplar durante el desarrollo de estos microrrobots, incluyendo la posibilidad de que algunos de estos se queden dentro del cuerpo humano, lo que podría provocar efectos secundarios desconocidos a largo plazo.
Así mismo, no se descartan las olas de teorías conspiracionistas que surgirán tras la llegada de estos nanorrobots, además de la desconfianza general que podría significar en un principio la idea de un cuerpo robótico dentro del cuerpo humano.

El logro más notable hasta ahora fue que se pudo erradicar una bacteria desde las fosas nasales de un cerdo y, actualmente, se está trabajando en un modelo funcional para realizar pruebas seguras en humanos con estos microrrobots que podrían ser la nueva cura para el resfriado.
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