Redacción: Central
¿Te ha pasado que de repente estás tan inflamada que hasta parece que estás embarazada de trillizos? ¿O que tienes que estar masticando a cada rato chicles de menta porque produces un mal aliento? Aunque no lo creas, éstos y otros problemas como la nauseas, reflujo, acidez, eructos y flatulencias, son consecuencia de una mala digestión.
Si no quieres sufrir de estos malestares, te recomendamos que pongas en práctica estos tips para que tu estómago trabaje de manera adecuada.
1. Menos comida procesada
Consumir este tipo de alimentos hace que ti sistema digestivo sea incapaz de seleccionar los nutrientes que necesita debido a que los químicos con los que están tratados hacen que se disuelvan en tu tracto digestivo y los contenidos de fibra bajen. Además, como se requiere de menos energía y trabajo para digerirlos, te sentirás con más hambre y comerás más.
2. Toma mucha agua
El agua facilita el trabajo de digestión
3. Mantente en movimiento
Si no estás activa, tu estómago tampoco lo está. Esto quiere decir que se hace flojo y tarda en procesar el alimento. Si quieres mejorar el trabajo intestinal, mantente siempre en movimiento.
4. La fibra es tu mejor amiga
La fibra ayuda a regular la actividad intestinal y previene el estreñimiento.

5. Come despacio
Toma tu tiempo para masticar cada bocado de tu comida. Esto ayudará a que des tiempo a tu estomago de digerir y a que te llenes más rápido con menos cantidad de alimento. Por ende, la comida a procesar será menor.
6. No te malpases
Si pasas muchas sin comer, y lo peor, lo vuelves un hábito, sólo conseguirás que tu cuerpo guarde reservas de energía para poder soportar esos largos periodos donde lo no lo alimentas. En consecuencia, tu estomagó no realizará bien su digestión y además subirás de peso.
7. Tómalo con calma
Relájate y no seas presa del estrés, ya que de lo contrario, tu cuerpo buscará mantenerse en equilibrio y para ello puedes afectar a distintos sistemas como el digestivo.
Intenta estos consejos y dile adiós al estreñimiento.