Actualidad

Tras bambalinas con Ludwika Paleta y Osvaldo Benavides

Por: Redacción CENTRAL 09 junio 2016 • 4 minutos de lectura

Entrevistamos a la pareja de amigos y colegas antes de que iniciaran las funciones de 'Duele'. Aquí todo lo que nos contaron

Compartir:

Fotos: Tito Trueba/ Maquillaje: Jonathan Lule/ Peinado: Erick Moreno/ Coordinación de moda Ludwika: Karla Guindi/ Coordinación de moda Osvaldo: Juan de Dios Ramírez

Por: Brisa Granados

Quedan pocas semanas para que veas Duele, puesta en escena protagonizada por Ludwika Paleta y Osvaldo Benavides, quienes engalanaron la edición de mayo de Central. Aquí te dejamos todo lo que platicamos con este par de actores, quienes muestran una química innegable y presumen una larga amistad.

¿Cómo fue trabajar juntos en María la del barrio?
Ludwika: Ahí estábamos creciendo; nos cerrábamos el ojito, decíamos: “Mira, ya se está poniendo guapetón, tiene lo suyito”. De hecho, fuimos novios un rato, y pues bien, padre.
Osvaldo: Estaba perdidamente enamorado de ella desde El abuelo y yo, y logré convencerla de que fuera mi novia.

¿Por qué decidieron que funcionaban mejor como amigos?
L: A ver, pregúntale a él… a ver si se acuerda (risas).
O: Fuimos novios como un año; estábamos muy chicos: teníamos como 17 años. Yo no estaba listo. Sólo sabía que me encantaba y daba la vida por ella. De pronto uno no sabe qué hacer, cómo echarle ganas… no funcionó y nos separamos. Pasó el tiempo; finalmente platicamos y entendimos que ese novio que la dejó pertenecía al pasado. Desde entonces no hemos dejado de ser amigos.

Ludwika Paleta y Osvaldo Benavides


¿Cómo son fuera de los escenarios?
L: Osvaldo es de esas personas que veo y digo “Ah, es Osvaldo”. Es como mi hermano. Me ha visto en los mejores momentos de mi vida, gorda, flaca, bonita, fea, recién parida… ¡todo! No hay mucho que esconder.
O: Hemos vivido muchas cosas como amigos; nos hemos acompañado en distintas etapas. Puede pasar un año sin vernos, pero estamos en contacto; andamos ahí espejeándonos.

Hablando de heridas: Duele es una obra que habla de una mujer y un hombre que se encuentran a lo largo de 30 años en eventos dolorosos de su vida y curan sus heridas mutuamente.
L: A veces tenemos relaciones muy profundas y puede pasar mucho tiempo sin ver a esas personas, pero son quienes más nos quieren. Evitamos a esa gente porque dice las cosas como son. Nos identificamos tanto con ellas que chocamos, y hasta pueden recordarnos las peores cosas de nosotros.

¿Qué significa para ustedes este proyecto?
L: La chamba del productor es enorme: quieres lo mejor pero no te salen las cuentas. El teatro no se hace para ganar dinero, no es el mejor negocio al que te metes en la vida.
O: No somos dos personas que se conocieron para hacer dinero, sino dos amigos entrañables que encontramos un texto que hace sentido con nosotros. Es un proyecto de corazón y pasión, el principio de algo nuevo y lo queremos compartir con la gente. Es mucho más que una obra, quizá no lo vean pero lo van a sentir.

Osvaldo Benavides y Ludwika Paleta


¿Cuál es la herida de infancia que no has sanado?
L: Una de las más profundas, que tengo casi 30 años trabajando, es haberme convertido en famosa cuando era niña. La gente piensa que es padre, pero no es fácil que te volteen a ver, que te jalen, que quieran algo de ti. Ha sido un tema de terapia. Cuando eres chiquito esas heridas se quedan hasta la edad adulta, porque no tenemos una mente lógica y nuestro sistema de creencias se está formando.
O: Creo que el abandono que uno siente de sus papás. No es que mis papás me hayan dejado, pero una vez, cuando era muy pequeño, no pudieron llegar a una obra de teatro que hice. Eso me partió el corazón. Estaban ocupados, no es su culpa. Papás, no se enojen; no me estoy quejando.

¿Cuál es la herida que más los ha marcado?
L: La muerte de mi mamá.
O: Las que uno mismo se hace. Los errores que uno comete, que en el fondo significan aprendizaje. Por ejemplo, cuando me salí de casa era muy joven, 15 años, y dejé toda la comodidad, pero fue bueno. También es fuerte cuando se acaba el amor y se rompe una pareja.

¿Cuál es la cicatriz más significativa de su cuerpo?
L: Una en la rodilla ¡la portaba con un orgullo! Me caí de un árbol cuando era chiquita, era la mitad de la rodilla. Me gustaba trepar a los árboles; siempre traía las rodillas con costras, y me encantaba ponerme falda para que se vieran.
O: En la frente tengo la más grande. De niño iba corriendo, tropecé y aterricé en una maceta.

Ludwika Paleta y Osvaldo

¿Qué les lastima de las personas?
L: Con el tiempo he aprendido que tú te hieres porque quieres. La gente es de una manera y tú decides enojarte o no, lastimarte o no, es tu bronca.
O: La ignorancia, que no somos derechos, honestos… pero es uno quien permite que lo hieran.

¿Qué les hiere de México?
L: Que la gente sea conformista.
O: La corrupción, el robo, el engaño, la desigualdad, el conformismo y los contrastes. Teniendo tanto potencial y siendo un país tan rico, que decidamos estar como estamos es un dulce amargo.

¿Cómo contrarrestan el dolor?
L: El dolor no necesita ser contrarrestado, sino sentirse. Una mala creencia es que si nos duele algo, debemos tomar una pastilla. En la medida en que sepas cuánto dolor puedes aguantar, sabes qué tan fuerte eres.
O: No lo contrarresto, lo siento y lo dejo ser.

¿Cuál es su lado hiriente?
L: Que digo las cosas como las pienso en el momento y no tengo muchos filtros.O: Mi egoísmo, básicamente.

Osvaldo y Ludwika

¿Les ha pasado que acabas de conocer a alguien y sientes que lo conoces de años? ¿Qué hacen cuando pasa?
L: Me caso (risas). Me pasó con Emiliano.
O: Sí, me ha pasado, de adolescente más. Es algo ilusorio, pero cuando pasa hay que compartirlo en ese momento.

¿Cómo se han sentido al ver a sus hijos heridos?
L: Es peor que cuando te pasa a ti. Esa es la empatía y compasión, cuando eres capaz de sentir y poner en los zapatos de alguien más. Como humanidad no hemos llegado a sentir esa compasión.
O: Horrible, es una ansiedad tremenda y quieres evitarlo a toda costa, pero es parte de su vida.

¿Qué es lo que más admiran el uno del otro?
L: Yo creo que su tenacidad. Él es el que dice “Vamos a levantar esto”, y está ahí hasta que lo logra.
O: Es excelente madre, íntegra, tiene convicciones y me encanta como actriz. Es de las más completas de su generación y lo hace con una gracia infinita. La admiro como persona y artista.

Si te perdiste nuestra edición de mayo, la puedes leer en nuestra app para iPad.

×
X