México es un país repleto de magia, donde increíbles destinos nos sumergen en maravillas únicas e irrepetibles, con belleza natural incomparable. Uno de los más destacados es Cozumel.
Rica en historia, vestigios mayas y maravillas naturales, esta joya del Caribe mexicano es una isla única, conocida en general por sus playas estupendas y bellos atardeceres, y famosa a nivel mundial por sus arrecifes de coral.
El inigualable mundo submarino de Cozumel
Existen miles de palabras para intentar describir los colores del mar Caribe, pero ninguna le hace justicia. Con un caleidoscopio de turquesa, aquamarino y verde, además de un sinfín de tonalidades azules, este mar no tiene igual en el planeta.
Jacques Cousteau declaró a Cozumel como uno de los sitios de buceo más espectaculares del mundo. La parte más atractiva del buceo en Cozumel es realizar esta actividad en “las paredes”, las cuales tienen hermosas y grandes formaciones de coral, donde se puede pasar a través de increíbles arrecifes, como Palancar.
Allí puedes encontrar vida marina como el pez ronco, el pargo, el espléndido pez sapo, el pez ángel, el pez loro, la morena, el mero, la tortuga carey, el pez trompeta, el pez perro, el pez tambor manchado, el medregal, la langosta, el pulpo, la mantarraya e, incluso, el caballito de mar de hocico largo.
Estos cientos de tesoros submarinos, sumados a las aventuras que se pueden vivir en la jungla, le han otorgado a Cozumel la fama de ser un exótico portal al mundo maya.
Un remanso de tranquilidad
Con los pies en las aguas cristalinas del Caribe y la cabeza en las nubes, el hermoso hotel B Unique nos pone en contacto con la increíble naturaleza que lo rodea y nos sumerge en un mundo de relajación, paz y armonía.
Tiene espacios modernos, amplios y luminosos, con una incomparable vista al mar o a la selva, ideados para que nuestro descanso sea total. En sus estancias coloridas se respira el espíritu caribeño por los cuatro costados. Durante mi tiempo allí, me encontré en un espacio lleno de originalidad, con personalidad y alma: un hotel único, como lo dice su nombre.
Los seductores tonos de la alberca infinity se mezclan con las tonalidades azuladas del mar, atrayendo mi mirada hasta el horizonte, donde juegan pequeñas nubes blancas. Una infinidad de riqueza natural yace bajo las delicadas olas del mar, esperando ser descubierta por los que nos aventuramos a explorar sus maravillas.
Llevándonos de la mano a conocer lo más singular de la isla, B Unique crea experiencias inolvidables, todo en un entorno espectacular. Aquí los días pasan a su propio ritmo, con paseos en bicicleta, actividades acuáticas, experiencias culinarias deliciosas, masajes y momentos de paz que hacen de la estancia una vivencia imperdible.
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