En los últimos años, los “happy socks” se han convertido en un elemento básico para agregarle un toque de personalidad a cualquier look, además de ser tendencia desde verano del 2008 entre celebridades y steetstyle en general.
Y como hoy nos queda claro que este trend llegó para quedarse… Aquí les explicamos cómo lograrlo sin caer en la delgada línea entre lo cool y lo ridículo.
1. Deja que los calcetines sean el punto focal. Sí, no satures demasiado el look. La regla de oro para usar calcetines llamativos es que los demás elementos sean lisos y en colores neutros. Busquen lograr una monocromía entre el pantalón, camisa y saco.
2. Agrega complementos discretos en la misma gama de color. Fistoles, pañuelos, corbatas… Pero ¡ojo! si los calcetines son estampados, evita que la corbata también lo sea. Entre más discreta, mucho mejor.
3. Los calcetines deben combinar con el pantalón, NO con los zapatos. ¡Error de principiantes! Si los calcetines van a juego con los zapatos, la pierna se divide en dos: por un lado el pantalón y por el otro los zapatos y los calcetines. Pero… Si combinamos los pantalones con los calcetines, serán estos los que marquen el corte, dejando los zapatos de forma independiente. ¿La intención? Estilizar la figura y dar un efecto de mayor altura.
4. ¿Calcetines blancos? Nunca. A menos que sean en tonos claros o para ir al gym. Porque si optas por un outfit o traje oscuro, los calcetines blancos destrozarían el look. ¿Qué sí se vale? Busca modelos que tengan dentro de su estampado, algunos detalles en blanco.
5. Cuiden que no se vea la pierna. Para esto, debes asegurarte que los calcetines que compres tengan un buen resorte (para que no se bajen) y el largo ideal: 3 dedos abajo de la rodilla. Prueben sentarse o cruzar la pierna para comprobar que no sea vea nada de piel. En temas de imagen, es considerado de muy mal gusto, además de quitarle puntos al arreglo personal.
¡Así que ya saben, sigan estas reglas para convertirse en masters en el arte de combinar calcetines de colores!
El comentarista deportivo, Jorge Pinto, nos comparte en exclusiva sus pares favoritos.
