Dormir en una cama hecha por alguien más, no preocuparse por limpiar y tener todo al alcance suena como el paraíso… hasta que descubres que no todo en un cuarto de hotel es tan limpio como aparenta.
Algunos objetos aunque parecen inofensivos podrían estar cargados de bacterias, gérmenes o incluso representar un gasto inesperado. Por eso, la próxima vez que entres a una habitación de hotel, presta atención a estos elementos que ahí encuentres.
7 objetos que no deberías tocar en la habitación de un hotel
Cafetera
Aunque es habitual encontrar una cafetera en el cuarto de un hotel, lo mejor es evitar su uso. La razón principal es que su limpieza suele ser superficial y no garantiza la eliminación de residuos de usos anteriores.
Además, hay casos documentados en los que los huéspedes utilizan estos aparatos para fines no convencionales (y nada higiénicos), por lo que confiar en su estado es un riesgo innecesario. Si deseas una bebida caliente, lo mejor es acudir a la cafetería del hotel o usar una opción sellada y segura.
Los vasos colocados en los baños
Uno de los secretos menos conocidos —y más inquietantes— de los hoteles es el tratamiento de los vasos que ponen en los baños. Aunque aparentan estar limpios, en muchos casos no se esterilizan correctamente. Algunos solo se enjuagan o se limpian con el mismo trapo que usan para otras superficies del baño. Si los necesitas, utiliza vasos desechables o bebe directamente de una botella de agua sellada.

Teléfonos
El teléfono fijo que suele estar en la mesa de noche o en el escritorio es otro de los objetos más olvidados durante la limpieza. A diario pasa por muchas manos, rostros y bocas, convirtiéndose en un foco de bacterias que pocas veces se desinfecta a fondo. Si necesitas usarlo, lo mejor es pasarle una toallita desinfectante antes de acercarlo a tu cara.
Dispensadores de jabón y champú
Aunque son una alternativa más ecológica en comparación con los envases individuales, los dispensadores de jabón y champú instalados en la pared del baño pueden convertirse en un caldo de cultivo para gérmenes si no se limpian con regularidad.
Incluso, en algunos casos, los huéspedes anteriores podrían haber introducido sustancias ajenas o incluso contaminado el contenido sin querer. Para evitar riesgos, lleva tus propios productos o asegúrate de que estén en envases sellados de un solo uso.

Cubrecamas
Es cierto que las sábanas y fundas de almohadas se lavan entre cada huésped, sin embargo los cubrecamas no corren con la misma suerte. Muchos hoteles los lavan solo de forma ocasional, lo que significa que podrían estar semanas o incluso meses sin un lavado profundo. Dado que su limpieza no es diaria, lo mejor que puedes hacer al llegar al cuarto de un hotel es retirarlo y evitar el contacto directo.
Cojines decorativos
Esos bonitos cojines que adornan la cama suelen ser elementos puramente estéticos, y su limpieza suele ser mínima o nula. A diferencia de las almohadas principales, rara vez se lavan, lo que los convierte en verdaderos imanes de ácaros, polvo y bacterias. Si eres alérgico o cuidadoso con la higiene, lo ideal es que los retires de la cama antes de que decidas acostarte en ella.

Minibar
El minibar puede parecer una tentación irresistible, pero es mejor mantenerlo cerrado. Algunos hoteles tienen sistemas automatizados con sensores que registran cualquier movimiento dentro del refrigerador, esto podría generar un cargo extra a tu cuenta,incluso si solo moviste un producto sin consumirlo, así que ten cuidado con lo que tocas.
Por otro lado, los snacks y bebidas almacenados durante mucho tiempo pueden perder su frescura. Si necesitas algo, es más seguro comprarlo en una tienda cercana o pedirlo directamente al servicio a la habitación.
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