Durante aproximadamente 2000 años, la humanidad ha celebrado Navidad alrededor del mundo, que conmemora el nacimiento de Jesucristo cada 25 de diciembre, hoy en día, acompañado de una cena a lado de seres queridos, incluye intercambiar regalos y esperar la llegada de una figura como Santa Claus, el Niño Dios o los Reyes Magos, sin embargo, el origen de esta celebración católica tiene raíces paganas.
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De acuerdo a la tradición, la noche del 24 de diciembre, José y la Virgen María buscan posada, para que ella de a luz al hijo de Dios dentro de un establo, a quién cubrirán de mantas y recostarán en un pesebre, sin embargo, existen datos que comprueban que esto pudo haber sido de una forma muy distinta.
Los orígenes paganos de la Navidad
La Navidad es el producto de una mezcla de distintas celebraciones, siendo una de las más importantes la de las Saturnales, festejo romano en honor al dios de la agricultura y la cosecha, Saturno, que sucedía del 17 al 23 de diciembre, a la par del solsticio de invierno.
En esta época, la carga de trabajo podía ser aplazada, y en general, las personas visitaban a sus seres queridos para celebrar con grandes banquetes, donde intercambiaban regalos, además que los esclavos podían gozar de ciertos lujos que usualmente no se les otorgaba, como vestir las ropas de sus amos, quienes también los atendían durante el festejo.
Además de las Saturnales, el 25 de diciembre los romanos celebraban el nacimiento del dios del Sol, Apolo, llamado Natalis Solis Invicti, que eventualmente se convirtió en la fecha del nacimiento de Jesucristo, pues según estudios, se cree que Jesús realmente debió haber nacido entre agosto y septiembre. No fue hasta el año 1223 que San Francisco de Asís escenificó el nacimiento de Jesucristo como hoy lo conocemos.
Orígen del Árbol de Navidad
En cuanto al árbol de Navidad, esta tradición surgió en el norte de Europa, cuando los primeros cristianos llegaron a predicar a estas zonas, tras darse cuenta de que durante sus celebraciones navideñas, los habitantes, aún paganos, festejaban el nacimiento de Frey, dios del sol y la fertilidad, en la misma fecha, adornando un árbol que simboliza al Yggdrasil (el árbol del Universo), decidieron retomar la tradición con el fin de evangelizar a estos pueblos.
La Navidad como tal fue establecida en un principio por el papa Julio I entre el 320 y 353 después de Cristo, quién fijó el 25 de diciembre como fecha solemne, con el posible fin de convertir a los romanos paganos al catolicismo. Posteriormente, el papa León Magno la hizo oficial para los religiosos en el año 440, aunque se convirtió en festejo general del Imperio Romano con el emperador Justiniano en el año 529.
Los orígenes de la Navidad son amplios, mezclando muchas celebraciones paganas con el posible fin de evangelizar a los pueblos
politeístas de Europa, sin embargo, hoy en día, la esencia principal es la de paz, amor y generosidad. ¡Feliz Navidad!
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